Acudir a una biblioteca a pedir un libro es de lo más común, sin embargo, ahora existen bibliotecas humanas, en donde en lugar de libros te llevas personas; para poder aprender de la historia de alguien.
Madres solteras, personas obesas, refugiados, transgénero, vagabundos, son sólo algunas de las personas voluntarias que se han prestado a este proyecto que tiene como objetivo el mismo que un libro: aprender de alguien más.
“Cuando lees utilizas la imaginación y eres receptor, con las bibliotecas humanas es lo mismo, las personas comparten contigo sus historias y tú puedes elegir la de quién quieres conocer e incluso, responderá a tus preguntas”, indicó Ronni Abergel, creador de la iniciativa.
La biblioteca humana es una experiencia que inició la ONG Stop the Violence en la ciudad danesa de Copenhague en el año 2000, dentro del Festival de Roskilde (uno de los mayores festivales de verano en Europa). Aunque el verdadero origen se remonta a un proyecto que se gesta en esa misma ciudad en 1993 cuando cuando cinco adolescentes (Ronni Abergel, Erich Kristoffersen, Asma Mouna, Thomas Bertelsen y Dany Abergel) preocupados por la violencia crean este movimiento que incentiva el diálogo para fomentar el entendimiento a través del intercambio de conocimientos y así concienciar a los jóvenes contra la violencia.
Su objetivo fue, desde un primer momento, disminuir la discriminación entre los jóvenes celebrando la diferencia y promoviendo el diálogo, la tolerancia, la comprensión hacia personas provenientes de diferentes estilos de vida o culturas y el aprendizaje. En ese momento había en Dinamarca una enorme confluencia de personas de distintas culturas, religiones y razas y se extendió en la sociedad danesa una especie de sentimiento de invasión. Precisamente para contrarrestar esta creencia se le dio forma a la biblioteca humana, una plataforma para fomentar el diálogo entre personas que en condiciones normales no hablarían jamás, consiguiendo poner en entredicho prejuicios y estereotipos, y ayudando a afianzar la cohesión social.
¿Cómo funciona una biblioteca humana?
Los usuarios que acceden a ella y consultan su catálogo en lugar de encontrar libros tradicionales hallarán personas con historias que contar y con las que se podrán sentar cara a cara durante media hora, no solo para escuchar sino para dialogar. Personas que en condiciones normales se vean excluidas de la comunidad por su condición social, económica, política o incluso física; personas que se hayan visto expuestas a la crítica o a los prejuicios de otras personas; que tengan algún tipo de discapacidad; que hayan sido desplazadas; o que se hayan visto sometidas a una situación de violencia; ex alcohólicos o ex drogadictos; prostitutas.
Algunos de los títulos que han pasado por una biblioteca humana incluyen: Historia de un gitano, Veterano de la Guerra de Irak, Chico de orfanato, Hijo de supervivientes del Holocausto, Atleta olímpico, Mujer gorda o Cristiano crítico.
«No juzgar un libro por su cubierta», es la frase que mejor describe el proyecto. Pero aunque en las bibliotecas humanas se priorice la marginación, para poder integrarla dentro de la comunidad, cualquier persona es libre de contar su historia. Desde que empezaran a funcionar se ha extendido a más de 50 países por todo el mundo. Lo único que se necesita es gente dispuesta a contar sus historias y personas que quieran escuchar.
A continuación les dejamos algunos videos sobre este proyecto:
Fuente: La Piedra de Sisifo; Ángulo7 y El Club de los Libros Perdidos
Véase además:
Human Library
Historia de Human Library
Madres solteras, personas obesas, refugiados, transgénero, vagabundos, son sólo algunas de las personas voluntarias que se han prestado a este proyecto que tiene como objetivo el mismo que un libro: aprender de alguien más.
“Cuando lees utilizas la imaginación y eres receptor, con las bibliotecas humanas es lo mismo, las personas comparten contigo sus historias y tú puedes elegir la de quién quieres conocer e incluso, responderá a tus preguntas”, indicó Ronni Abergel, creador de la iniciativa.
La biblioteca humana es una experiencia que inició la ONG Stop the Violence en la ciudad danesa de Copenhague en el año 2000, dentro del Festival de Roskilde (uno de los mayores festivales de verano en Europa). Aunque el verdadero origen se remonta a un proyecto que se gesta en esa misma ciudad en 1993 cuando cuando cinco adolescentes (Ronni Abergel, Erich Kristoffersen, Asma Mouna, Thomas Bertelsen y Dany Abergel) preocupados por la violencia crean este movimiento que incentiva el diálogo para fomentar el entendimiento a través del intercambio de conocimientos y así concienciar a los jóvenes contra la violencia.
Su objetivo fue, desde un primer momento, disminuir la discriminación entre los jóvenes celebrando la diferencia y promoviendo el diálogo, la tolerancia, la comprensión hacia personas provenientes de diferentes estilos de vida o culturas y el aprendizaje. En ese momento había en Dinamarca una enorme confluencia de personas de distintas culturas, religiones y razas y se extendió en la sociedad danesa una especie de sentimiento de invasión. Precisamente para contrarrestar esta creencia se le dio forma a la biblioteca humana, una plataforma para fomentar el diálogo entre personas que en condiciones normales no hablarían jamás, consiguiendo poner en entredicho prejuicios y estereotipos, y ayudando a afianzar la cohesión social.
¿Cómo funciona una biblioteca humana?
Los usuarios que acceden a ella y consultan su catálogo en lugar de encontrar libros tradicionales hallarán personas con historias que contar y con las que se podrán sentar cara a cara durante media hora, no solo para escuchar sino para dialogar. Personas que en condiciones normales se vean excluidas de la comunidad por su condición social, económica, política o incluso física; personas que se hayan visto expuestas a la crítica o a los prejuicios de otras personas; que tengan algún tipo de discapacidad; que hayan sido desplazadas; o que se hayan visto sometidas a una situación de violencia; ex alcohólicos o ex drogadictos; prostitutas.
«No juzgar un libro por su cubierta», es la frase que mejor describe el proyecto. Pero aunque en las bibliotecas humanas se priorice la marginación, para poder integrarla dentro de la comunidad, cualquier persona es libre de contar su historia. Desde que empezaran a funcionar se ha extendido a más de 50 países por todo el mundo. Lo único que se necesita es gente dispuesta a contar sus historias y personas que quieran escuchar.
Fuente: La Piedra de Sisifo; Ángulo7 y El Club de los Libros Perdidos
Véase además:
Human Library
Historia de Human Library
Buenos días, en su post comparte uno de los videos del Centro de Desarrollo Sociocultural sobre la concepción de la Biblioteca Humana. En este centro de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez llevamos desde 2012 experimentando acciones de Biblioteca Humana, le dejo aquí un artículo sobre ellas: http://www.biblogtecarios.es/mariamoreno/en-sobre-desde-la-biblioteca-humana/ Un saludo.
ResponderEliminarHola María! Buen día! Muchas gracias por tu aporte. Es muy valioso. Saludos y buena semana!
EliminarQue encantador!!! Que diversidad de historias y de bellas y misteriosas "cubiertas humanas" Quiero apuntarme a empezar esa iniciativa. Quién me acompaña? Tal vez Miosotis, Maljorys, Carmen Isa, Lillian, Consuelo??????
ResponderEliminarMaravilloso
ResponderEliminarBuenas noches, de que forma siendo persona independiente puedo trabajar el proyecto Bibliotecas Humanas? , soy de Yopal - Casanare / Colombia
ResponderEliminarAgradecidos con el articulo.
ResponderEliminarun fuerte abrazo desde nuestro rincón Hojas al Viento.
Yupaychani.
Kaya kaman.
https://www.facebook.com/hojasalvientolibreria/
Realmente maravillosa y muy creativa esta propuesta pues los seres humanos somos libros abiertos, llenos de experiencias vivenciales que se enriquecen al compartirlos con otros seres humanos que tiene necesidad de un conocimientos palpitantes y emocionantes. FELICITACIONES
ResponderEliminarExcelente proyecto! Felicidades.
ResponderEliminarGracias por compartir la experiencia. No sé si en Argentina se intentó, pero sería genial. Saludos!
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