Ser un lector entusiasta tiene muchos beneficios, pero también muchos momentos oscuros en los que las cosas no son tan maravillosas como parecen, momentos en los que los libros te juegan malas pasadas (como por ejemplo cuando tienes que hacer una mudanza y te planteas no leer jamás ni un solo libro más) y en los que te encuentras maldiciendo tu suerte. Presentamos una lista con algunos de esos momentos terribles que todos hemos vivido alguna vez como lectores, pero seguramente, cada uno tenga unos cuantos dramas que sumar al listado.
Fuente: Libropatas
Foto: Nadine Heidrich
- El momento en el que acabas el libro… pero aún te quedan millones de minutos de viaje y no tienes nada más que leer
- El momento en el que te das cuenta de que has calculado mal los libros que te llevaste a las vacaciones (y estás en un lugar en el que no puedes comprar más)
- El momento en el que descubres que hay un libro que continua al que acabas de leer ¡pero no te lo puedes comprar!
- El momento en el que descubres que va a haber una continuación al libro que acabas de leer, pero que no saldrá hasta dentro de año y medio…
- … o que la editorial que lo está publicando en tu idioma de lectura no lo tiene en sus planes de traducción
- El momento en el que llegas a la sala de espera del médico y descubres que te has dejado el libro en casa
- El momento en el que el ereader se apaga porque se ha quedado sin batería y te agarra la desesperación
- El momento en el que entras en todas las librerías en un radio de dos kilómetros a la redonda de tu casa y el libro que quieres está agotado
- El momento en el que acabas un libro, quieres hablar de él, pero nadie más lo ha leído
- El momento en el que tu libro se moja por accidente (a mí se me abrió una botella de agua en el bolso: horror)
Fuente: Libropatas
Foto: Nadine Heidrich
Yo tengo dos momentos, muy parecidos.... El momento en el que te das cuenta que el libro que te compraste en el aeropuerto y te comenzaste a leer antes y durante el vuelo se ha quedado en el carrito del equipaje y tienes que esperar hasta la vuelta de las vacaciones para comprarlo!!!
ResponderEliminarEl momento en el que vuelves del cajero y te das cuenta que te has dejado ahí apoyado la segunda parte del libro del que ya estabas por la mitad y que encima te ha costado un pastón. Y vuelves y, por supesto, no está.
Los dos son libros que debes volver a comprar por tener tanta prisa en hacer las cosas y no viglar ese metro de seguridad que debe haber siempre entre un lector y su libro.