La Universidad de Michigan atesora un archivo de más de 7.000 videojuegos

La colección se financia mediante el Sistema de Bibliotecas de la Universidad de Michigan, y tiene un presupuesto para comprar los videojuegos que vayan saliendo al mercado. Además acepta donaciones, que constituyen aproximadamente la mitad de su contenido.




Así como ciertas personas coleccionan libros, discos o estampillas, la Universidad de Michigan colecciona videojuegos al considerar que son parte intrínseca de la cultura contemporánea.

La Universidad de Michigan atesora en su Computer and Video Game Archive collection más de 7.000 videojuegos distintos, de todas las épocas, junto a las más variadas plataformas, consolas y ordenadores. La iniciativa comenzó en 2008 y, Dave Carter, preservador del archivo, ha dado nuevos detalles.


Una moderna biblioteca de Alejandría

El archivo contiene títulos clásicos como Pac-Man y Frogger a las sagas completas de Call of Duty y Halo. Se encuentra en Ann Arbor, concretamente en el Duderstadt Center, y ofrece la oportunidad de probar consolas de extrema rareza o videojuegos de tiradas muy limitadas.



Dave Carter ha destacado que "es muy importante tener un archivo como el siguiente, pues los videojuegos forman parte a día de hoy de nuestra cultura". Carter, que se considera un gran aficionado a los videojuegos -recibió su primera consola a los 12 años y desde entonces ha ido jugando a distintas plataformas-, cree que es una buena forma de ofrecer a las generaciones venideras una perspectiva de un mercado y una afición que a día de hoy factura más que el negocio cinematográfico.

La colección se financia mediante el Sistema de Bibliotecas de la Universidad de Michigan, y tiene un presupuesto para comprar los videojuegos que vayan saliendo al mercado. Además acepta donaciones, que constituyen aproximadamente la mitad de su contenido.

Si bien sería magnífico tener todos los videojuegos creados en la historia, las limitaciones presupuestarias y la vertiginosa rapidez con que los juegos están saliendo al mercado hacen de ello un objetivo irrealizable.




Fuente: Excelsior y Vandal


Véase además:

Library University of Michigan

Comentarios