10 grandes ideas para inspirar la nueva biblioteca de Ottawa

Este proyecto, que será de suma importancia para los habitantes de Ottawa, busca seguir el camino de las nuevas bibliotecas de todo el mundo que han capturado los corazones y las mentes de sus usuarios, convirtiéndose en verdaderos centros de acceso a la información, a la innovación y a la democracia.



El sitio donde estará ubicada la nueva biblioteca de Ottawa es, actualmente, una zona en construcción en el extremo este de LeBreton Flats. Para 2024, este lugar albergará conjuntamente la nueva sucursal de la Biblioteca Pública de Ottawa, junto con los Archivos de Canadá.

Vista del área de LeBreton Flats donde va a estar ubicada la nueva biblioteca. Foto del 29 de mayo de 2019. JULIE OLIVER / POSTMEDIA

El equipo detrás de este proyecto de 216,000 pies cuadrados con un precio de $ 193 millones se encuentran realizando una gira mundial de bibliotecas, donde encuestan a instituciones destacadas con miras a dar forma a la nueva Biblioteca Pública de Ottawa. También, están realizando consultas en Canadá, organizando actividades de participación comunitaria, en línea y en persona, para contar con la opinión de los futuros usuarios.



Este proyecto, que será de suma importancia para los habitantes de Ottawa, busca seguir el camino de las nuevas bibliotecas de todo el mundo que han capturado los corazones y las mentes de sus usuarios, convirtiéndose en verdaderos centros de acceso a la información, a la innovación y a la democracia.

A continuación y a través de un trabajo de investigación y entrevistas con autoridades bibliotecarias de Canadá y del extranjero, se ha compilado una lista de 10 grandes ideas para inspirar la nueva biblioteca de Ottawa.

1. Bibliotecas inspiradas en la comunidad

Ya sea que se trate de una geografía física o de una herencia cultural, las señales de la comunidad circundante son una fuente perenne de inspiración para los diseñadores de bibliotecas.

Imagen de archivo de la biblioteca de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en la Ciudad de México. HO / AFP / GETTY IMAGES

En la Biblioteca Central de la UNAM en la Ciudad de México, la historia del país está literalmente consagrada en las paredes del edificio. Construida en la década de 1950 y diseñada por el famoso arquitecto y pintor Juan O'Gorman, las piedras de colores de todo el país forman murales de mosaicos que representan imágenes culturalmente relevantes y escenas históricas mexicanas.

La sucursal de Chinatown, de la Biblioteca Pública de Chicago fue moldeada por los principios del feng shui, una práctica china de alinear espacios con flujos de energía. Una biblioteca de concepto abierto en Tilburg, Países Bajos, fue construida en un antiguo cobertizo de los Ferrocarriles Nacionales Holandeses, y tiene columnas industriales originales y vías de tren que lo atraviesan.

La nueva Biblioteca Pública en el barrio chino de Chicago. EYFOTO / GETTY IMAGES / ISTOCKPHOTO

No solo la infraestructura física de una biblioteca puede reflejar la naturaleza única del lugar en el que se encuentra. Si bien la nueva biblioteca central de Austin fue diseñada con un jardín en la azotea y patios de lectura para reflejar la pasión de los texanos por el aire libre, también adapta su programación al carácter de su comunidad. Una gran población de habla hispana hizo de las clases de enseñanza del idioma una opción lógica, contó Sidney Bowen. El director gerente de Shepley Bulfinch, una de las dos empresas de arquitectura que están detrás del diseño de la biblioteca dijo:  "Hágalo culturalmente como Austin, o en su caso, culturalmente como Ottawa".

El futuro sitio de la biblioteca en 555 Albert St. se encuentra en el extremo oeste del centro de Ottawa y la franja de instituciones nacionales a lo largo de Wellington Street. Ofrece vistas y fácil acceso a través del río Ottawa a Quebec, y se sienta en el borde de LeBreton Flats. Se encuentra entre la zona urbana de Ottawa y un paisaje más salvaje, pero también cultural.

"Es realmente una especie de ruta que conecta a los tres pueblos fundadores: francés, inglés e indígena", dijo Donald Schmitt, arquitecto principal del proyecto y director fundador de Diamond Schmitt Architects. Una de las muchas preguntas que el equipo de diseño se hace, es cómo reunir a las tres comunidades "en el edificio y crear una especie de terreno común, una plaza de la ciudad", dijo Schmitt. También mencionó la posibilidad de un espacio de lectura al aire libre en el techo para aprovechar las amplias vistas del sitio.

2. Bibliotecas sostenibles

Schmitt dejó caer otra pista sobre sus prioridades para la nueva súper biblioteca: minimizar su huella de carbono y aprovechar la energía renovable. Dijo que su oficina ya ha diseñado tres edificios que producen más energía eléctrica de la que usan, y es "absolutamente posible" que este proyecto pueda lograr lo mismo.

"Estamos muy interesados ​​en lograr un estándar muy alto de sostenibilidad", explicó Schmitt. Es ese punto de referencia en el que las bibliotecas de todo el mundo compiten cada año, por el Premio de la Biblioteca Verde de la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecas e Instituciones.

Foto de Facebook de la Biblioteca Foshan. (Foto: Angel Lu) JPG

La Biblioteca Foshan, ubicada en la provincia china de Guangdong, obtuvo oro en 2018. El edificio cuenta con un sistema de reutilización de agua de lluvia, una fachada de vidrio diseñada para aprovechar la luz natural y el calor, siete jardines separados en diferentes pisos, luces LED inteligentes en sus estantes que se apagan automáticamente Cuando los lectores abandonan el área, y las operaciones de oficina sin papel.

El anterior ganador de la Biblioteca Verde, Stadtbibliothek Bad Oldesloe en Alemania, se llevó el primer premio por años de programación centrada en la jardinería urbana y la agricultura. La biblioteca de la pequeña ciudad (la población de Bad Oldesloe es de 25.000) organizó un taller de intercambio de semillas, talleres de jardinería, competencias infantiles de cultivo de frijoles y visitas guiadas de forrajeo.

Estos programas y una lista de otros hicieron a los usuarios de la biblioteca "los protagonistas de una amplia variedad de actividades para promover la sostenibilidad", dijo un crítico de premios.

3. Bibliotecas indígenas

Ya se ha dejado en claro que la nueva súper biblioteca de Ottawa incorporará la cultura y el patrimonio indígenas. La ciudad está financiando el arte público indígena, y el equipo del proyecto ha establecido reuniones pasadas y planificadas con grupos indígenas locales y nacionales. Guy Berthiaume, bibliotecario y archivista de Canadá, dijo que la nueva instalación conjunta ofrecerá un espacio dedicado para los pueblos indígenas.

"Pero cómo se verá, cómo se sentirá, cuál será su propósito, etc., eso también es algo que no queríamos definir por nosotros mismos", dijo Berthiaume.

Leonard Hill es el director ejecutivo de colecciones del Australian Institute of Aboriginal and Torres Strait Islander Studies. Sus instalaciones de Canberra albergan una colección nacional de libros, películas, arte y sonido relacionados con los australianos indígenas, y ofrecen servicios similares a los de la Biblioteca y los Archivos de Canadá.

"Es genial que tengamos un archivo y una colección de materiales tan extensos y maravillosos que describan a los australianos indígenas, pero como cualquier archivo o colección de materiales, el valor real es cuando las personas se dan cuenta y entienden lo que tenemos", señaló Hill.

4. Bibliotecas atractivas

Llamarlo poco atractivo podría ser una exageración, pero la biblioteca central actual de Ottawa ciertamente no lo alienta a salir del camino por el que está caminando. La CEO de la Biblioteca Pública de Ottawa, Danielle McDonald, es la primera en reconocer esta desafortunada realidad.

"Cuando caminas por la calle, ¿cómo sabes que es una biblioteca?", dijo McDonald. "No lo veo tan diferente a muchos de los edificios aquí abajo".

"En lugar de una estructura de hormigón brutalista en la esquina del centro de Metcalfe Street y Laurier Avenue, quiero una nueva biblioteca central que llame la atención, lo que le permite comenzar a experimentar la biblioteca antes de llegar a ella", expresó McDonald.

Amanece sobre la nueva Biblioteca Central en Calgary. JPG

Es un deseo basado en las mejores prácticas; solo pregúntele a Janice Liebe, directora de la firma de diseño DIALOG y arquitecta de proyectos para la nueva biblioteca central de Calgary, que se inauguró en noviembre de 2018. El equipo de diseño decidió tomar un bloque completo de norte a sur para permitir la estructura llamativa ser visible para los conductores que se aproximan en las calles de conexión.

"Las bibliotecas son edificios públicos y necesitan una presencia en la comunidad", contó Liebe. "No debería estar escondido, debería ser un lugar importante en la ciudad".

Más de 52.000 visitantes acudieron a la nueva sucursal central de Calgary durante sus primeros cuatro días. Y su popularidad no muestra signos de desaceleración. La lista anual de "Lugares para ir" del New York Times para 2019 incluyó a Calgary entre sus dos destinos canadienses, y la gran mayoría de sus artículos se centraron en la biblioteca.

El atractivo del sitio, dijo Liebe, se ve favorecido por el hecho de que es un puente natural entre dos áreas de la ciudad que antes estaban desconectadas por vías del tren ligero. La biblioteca solucionó ese problema cuando se construyó directamente sobre la línea de ferrocarril. "Reunió a la gente de una manera que nunca antes habían podido moverse por la ciudad", dijo Liebe.

Una imagen interior de la nueva biblioteca de Calgary. ANDREW CHIN / JIM WELLS / POSTMEDIA

Si bien 555 Albert St. no comparte precisamente la misma situación geográfica, todavía hay mucho que se puede hacer para atraer flujos de personas, desde el parque exterior y los espacios de espectáculos, hasta las paredes de cristal que permiten a un público curioso vislumbrar la acción en el interior.

"En lugar de un puente, piense en ello como un imán", dijo Liebe.

5. Bibliotecas accesibles

En una pequeña biblioteca en Richmond, BC, las personas con trastorno del espectro autista pueden relajarse y disfrutar de un libro. Es el tipo de experiencia que la mayoría de las personas da por sentado, pero el "espacio que no juzga a los sentidos y es amigable con los sensores" es un cambio de juego para sus usuarios, explicó la coordinadora de programas y bibliotecas de AutismBC, Allison Hill. Además de calmar los colores, la señalización clara y la ingeniería acústica especial, la biblioteca también alberga una importante colección de material relacionado con el autismo para pedir prestado.

"Varias personas me han dicho que realmente aprecian tener un espacio donde saben que el personal entiende el autismo y que saben que no serán juzgados o que nadie los mirará si el comportamiento de sus hijos es atípico o perturbador", dijo Hill.

Al otro lado del océano, el objetivo de hacer que las bibliotecas públicas sean más acogedoras para las personas con autismo fue liderada por una organización sin fines de lucro con sede en el Reino Unido llamada Dimensions para desarrollar una "capacitación en bibliotecas que respeta el autismo". El material en línea está disponible para descargar de forma gratuita y ofrece información básica. información sobre los comportamientos que pueden esperar de los usuarios de bibliotecas con autismo, así como las formas en que las bibliotecas pueden hacer que su espacio y programación sean más accesibles para estos usuarios.

"La comunidad autista solo quiere las mismas oportunidades que todos los demás y eso debería ser una motivación suficiente para que las bibliotecas participen", pidió Sarah Clarke, directora de la campaña de Dimensions.

6. Bibliotecas que dan forma a la ciudad

El arquitecto de bibliotecas Ralph Wiesbrock cree que Ottawa está al borde de un cambio transformador. También cree que la nueva biblioteca de la ciudad podría ser una pieza clave en esa transformación.

"El desarrollo de LeBreton Flats, creo que tiene a muchas personas asustadas", dijo Wiesbrock, director y socio de KWC Architects, una de las dos empresas de la empresa conjunta seleccionada para diseñar la nueva biblioteca.

Si bien es cierto que el desarrollo fallido de RendezVous LeBreton fue un factor en la selección de este sitio en particular para la nueva biblioteca, Wiesbrock señaló que el crecimiento de Ottawa combinado con el potencial de desarrollo de los Flats significa que eventualmente el área será construida, por alguien. Y dada la conexión de tránsito y la infraestructura planificada para el área, "tiene la oportunidad de ser una contraparte importante del centro de la ciudad", dijo.

A los ojos de Wiesbrock, la fusión de RendezVous LeBreton es una oportunidad, en lugar de un contratiempo. Le ha dado a Ottawa un momento para pensar más en lo que quiere que parezca una parcela tan importante de la ciudad.

Una mirada a la capital del estado de Texas podría resultar instructiva en esta nota para los planificadores de Ottawa. Si bien la nueva biblioteca central de Austin es impresionante por sí misma, también ejemplifica el papel que puede desempeñar una biblioteca en la construcción de la ciudad. Y sucede que comparte algunas sorprendentes similitudes con la nueva súper biblioteca de Ottawa: está ubicada en un terreno que anteriormente era industrial a lo largo del agua fuera del centro de la ciudad.

Biblioteca central de Austin, Texas. Imagen de Wikipedia por Mike Russell. PICASA / JPG

Hoy en día, la biblioteca central de Austin se encuentra en medio de un próspero vecindario nuevo llamado el Distrito de Seaholm, conectado por un puente a un bullicioso centro urbano y rodeado de desarrollos residenciales y comerciales. La transformación cohesiva del área no se produjo por accidente, dijo Steve Raike, socio asociado de Lake | Flato Architects. De hecho, tomó casi 20 años, financiamiento a través de bonos de elecciones municipales y mucho pensamiento a largo plazo.

"Hubo un alto nivel de participación en el departamento de planificación de la Ciudad de Austin", dijo Raike. "(Pero) esa parte del centro, la visión para eso, ha sido muy exitosa para Austin".

Si bien Wiesbrock no aboga por una pausa de dos décadas para planificar una visión verdaderamente integrada para LeBreton Flats, "creo que deberíamos tomarnos un momento y decir: 'OK, ¿cómo estamos liderando esto?'", Dijo.

7. Abrir bibliotecas

En Dinamarca, los titulares de las tarjetas pueden ingresar a su biblioteca pública para una sesión de estudio que dura toda la noche o un café y un periódico temprano por la mañana. Es un concepto llamado "biblioteca abierta" y, aunque se debió a circunstancias adversas, recortes presupuestarios, la decisión de no tener personal y de autoservicio durante las horas extendidas de la biblioteca ha sido muy exitosa en el pequeño país escandinavo.

"Mucha gente que no usaba la biblioteca en realidad comenzó a usarla, porque ahora era una posibilidad para ellos", dijo el consultor bibliotecario y bibliotecario danés Jan Holmquist.

Es una libertad inimaginable para los usuarios de bibliotecas públicas en Ottawa, donde las horas suelen oscilar entre las 10 am y las 9 pm Pero el concepto de biblioteca abierta ya ha encontrado una audiencia en Canadá.

Stadtbibliothek Stuttgart. (Foto: Wikipedia Commons) JPG

En 2017, la Biblioteca Pública de Hamilton decidió probar el modelo en su sucursal rural de Freelton. Según Bibliothecha, una compañía que proporciona soluciones de administración de bibliotecas, el uso de la sucursal de Freelton aumentó un 19 por ciento en solo cinco meses en el programa piloto "Open +". La Biblioteca Pública de Hamilton más tarde hizo permanente el proyecto y lanzó el concepto abierto en una segunda sucursal rural.

Existe la preocupación de que las bibliotecas abiertas puedan costar empleos. Pero según Holmquist, la investigación muestra que mantener las horas de personal es fundamental para el éxito de las bibliotecas abiertas. "Si crees que podemos tener una casa abierta llena de libros pero sin bibliotecarios, el uso de la biblioteca en realidad declina".

En lo que respecta a la seguridad de los usuarios y los materiales de la biblioteca en un espacio público no supervisado a última hora, las bibliotecas abiertas de Dinamarca están equipadas con cámaras, registro de libros de identificación por radiofrecuencia y requisitos de ingreso a la tarjeta de la biblioteca y al código pin.

"Es un proyecto de confianza radical", reconoció Holmquist. "Pero con mucha vigilancia pesada".

8. Bibliotecas socialmente comprometidas

Como bibliotecas públicas, seguras y de clima controlado, llenas de recursos disponibles de forma gratuita, las bibliotecas han servido de refugio durante mucho tiempo para las personas inseguras. Y hasta hace unos cinco años, el personal de la Biblioteca Pública de Seattle pensaba que esas medidas eran suficientes.

"Principalmente, mantuvimos las puertas abiertas y fuimos un espacio acogedor e inclusivo para todos", dijo Valerie Wonder, gerente de participación comunitaria en la Biblioteca Pública de Seattle. Entonces, la realidad en las calles de la ciudad más grande del estado de Washington llegó a un punto de ruptura. La asequibilidad de la vivienda alcanzó niveles de crisis, y en noviembre de 2015, la ciudad declaró el estado de emergencia de las personas sin hogar.

"El personal reconoció que solo había un gran número de personas en nuestros edificios que tenían necesidades y preguntas que las recomendaciones de nuestros bibliotecarios estándar no podían atender adecuadamente, por lo que comenzamos a ver qué podíamos hacer", recordó Wonder.

A través de fondos privados, lograron traer un trabajador social a la biblioteca. El servicio demostró ser lo suficientemente exitoso como para que la ciudad interviniera y se hiciera cargo de su financiamiento. Hoy en día, la biblioteca ofrece citas y cuatro sesiones sin cita con un trabajador social cada semana, que ofrece recomendaciones principalmente a los proveedores de servicios.

"Algunos días, hay una línea de salida", dijo Wonder. La biblioteca también ofrece puntos de acceso Wi-Fi a los campamentos para personas sin hogar de forma semipermanente, y alberga una lista de otros servicios cívicos y sociales, desde ayuda para veteranos hasta recursos para personas que salen de prisión.

"En cualquier entorno urbano donde hay muchas personas que necesitan servicios sociales o viviendas o que se enfrentan a otro tipo de crisis, las personas vienen a las bibliotecas públicas", dijo Wonder.

Si bien esto no es algo que la Biblioteca Pública de Ottawa haya hecho hasta la fecha, la CEO Danielle McDonald dijo que quiere comenzar a hablar sobre la posibilidad. "Podríamos traer esos servicios aquí si trabajamos juntos y creamos nuevas asociaciones", dijo.

9. Bibliotecas digitales

No se puede ignorar la pantalla táctil de siete metros en el centro de la planta baja de Christchurch, la nueva biblioteca central de Nueva Zelanda. El precio de $ 1.2 millones de la pantalla exige atención, pero igualmente o más llamativo, al menos para el consultor de bibliotecas Jan Holmquist, es el retorno de la inversión que el "muro de descubrimiento" ofrece a su comunidad.

La atracción de la biblioteca permite a los usuarios deslizar a través de una versión digital de Christchurch, explorar la historia de la ciudad y subir su propio contenido de la comunidad a través de un sitio web relacionado.

"Creo que valió la pena", dijo Holmquist, quien cree que todas las bibliotecas tienen un doble mandato: proporcionar acceso a la información y apoyar activamente el aprendizaje.

Turanga, Christchurch, Nueva Zelanda. Imagen de Wikipedia por Michal Klajban. JPG

"Vivimos en sociedades del conocimiento, y para tener un lugar donde todos sean bienvenidos, y todos puedan acceder no solo a la información, sino que también puedan traducir esa información en conocimiento, creo que eso es muy importante", señaló Holmquist. "Esa es la razón por la que creo que la pared táctil, sentir la historia local, es una muy, muy buena idea, es otra forma de dar acceso a las escrituras antiguas".

Ya sea que se trate de impresoras 3D o de realidad virtual, "las bibliotecas son realmente geniales para incorporar nuevas tecnologías y permitir que la comunidad las tenga en sus manos por primera vez", dijo Amy Garmer, directora de Diálogo sobre bibliotecas públicas del Instituto Aspen. Al conectarse a la red de Internet de educación e investigación de alta velocidad del estado, las bibliotecas públicas de California pueden ofrecer servicios como transmisiones en vivo de la caminata espacial de la NASA o para la capacitación de la fuerza laboral.

Las ofertas tecnológicas de la Biblioteca Pública de Ottawa son relativamente modestas en este momento: tienen un espacio de creación y prestan Chromebooks y puntos de conexión Wi-Fi, pero el CEO McDonald admite que a veces puede ser difícil encontrar una conexión Wi-Fi consistente. El plan para 555 Albert St. es "un entorno mucho más rico en tecnología", dijo McDonald, y agregó que es difícil saber qué aspecto tendrá cuando la biblioteca abra sus puertas en cinco años.

Debido a que es imposible predecir por completo qué tecnologías y usos necesita una biblioteca para soportar décadas en el futuro, lo mejor que pueden hacer las bibliotecas es prepararse desde el principio para cambiar cuando sea necesario. Tome la Biblioteca de Alejandría de Egipto, diseñada en 1989 y abierta al público en 2002.

"La computadora personal estaba empezando a emerger, por lo que comprendimos que estábamos al borde de un gran cambio tecnológico en la forma en que compartimos la información", dijo Craig Dykers, socio fundador de la firma de arquitectura Snøhetta.

Con el tiempo, dijo, las áreas de estudio grupal se transformaron en laboratorios de computación. El planetario de la biblioteca ahora crea sus propias películas científicas. Un espacio de oficina se convirtió en un estudio de grabación, y hoy en día, la Biblioteca produce audiolibros en árabe.

"Nuestro enfoque fue diseñar la biblioteca con suficiente capacidad y versatilidad para anticipar y adaptarnos al cambio tecnológico con el tiempo", dijo Dykers.

10. Bibliotecas de atracción turística

En la lista de TripAdvisor de las mejores cosas que hacer en la ciudad de Nueva York, la Biblioteca Pública de Nueva York tiene el lugar número 13, superando atracciones tan emblemáticas como Times Square, MoMA y Radio City Music Hall. No es un fenómeno aislado.

"Cada vez más, los veo aparecer en listas de viajes o cosas que hacer si estás en una ciudad en particular", dijo Monique le Conge Ziesenhenne, presidenta de la Asociación de Bibliotecas Públicas de la American Library Association.

Desde Salt Lake City hasta Stuttgart, abundan las listas que promocionan las bibliotecas más bellas, interesantes y de visita obligada del mundo. Y mientras que Ottawa generalmente no se menciona, el bibliotecario y archivista de Canadá Guy Berthiaume mantiene la esperanza de que la nueva súper biblioteca cambie las cosas.

Actualmente, la mayoría de los trabajos de restauración de la Biblioteca y los Archivos de Canadá se realizan a puertas cerradas, y su espacio de exposición es inferior al estándar. Eso significa que sus tesoros más preciados, como la Proclamación de la Constitución, no se pueden mostrar públicamente. El nuevo edificio en 555 Albert St. presentará la oportunidad de solucionar estos dos defectos, con una sala de exhibición con calidad de museo y un espacio para ver trabajos de restauración en vivo.

También tendrá un nuevo centro de genealogía y Berthiaume tiene la esperanza de que todas estas características pondrán la nueva súper biblioteca en el mapa de Canadá y más allá, uniéndose a las filas de otras bibliotecas nacionales como las de Londres y París, que están teniendo números "enormes" de visitantes.

Donald Schmitt, arquitecto principal de Diamond Schmitt Architects durante uno de los dos talleres de diseño para la nueva Biblioteca Pública de Ottawa que se llevó a cabo en Nepean Sportsplex el sábado 2 de marzo de 2019. ASHLEY FRASER / POSTMEDIA

Fuente: Ottawa Citizen

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