La casita de los sueños, la biblioteca que ayuda a la construcción de paz en el Caquetá

Esta es la iniciativa de una pareja que desde 2011 decidieron apostarle a llevar educación a las zonas más apartadas de este departamento colombiano.


Al igual que la biblioteca 'La casita de los sueños', otros proyectos de reincorporación y desarrollo educativo quedaron en este departamento tras la firma del Acuerdo de Paz. FOTO: Colprensa / Naciones Unidas)

Para entender la magnitud que tiene el proyecto de la ‘Casita de los Sueños’, es necesario tener en cuenta dos nombres: Luz Stella Salazar Morales y Humberto Patiño. Ambos son esposos y tuvieron el temerario sueño de generar esperanza a través de la educación en una zona como San Vicente del Caguán, en Colombia.



Históricamente, esta zona del país ha sido asediada por diferentes actores armados, no solo las ahora extintas Farc-Ep; y ni hablar de la falta de presencia de entidades estatales que fomenten un desarrollo económico estable, así como salud y condiciones estables de educación para los niños que habitan en este municipio.

Fue por esa razón que Salazar y Patiño decidieron construir, en 2011, una biblioteca móvil. Tomaron como herramienta una camioneta que tenía la sinuosa misión de cruzar trochas y caminos farragosos para llegar hasta las veredas más apartadas de aquel municipio caqueteño y cumplir el único propósito de promover la lectura y escritura entre los pequeños agricultores que, por falta de una escuela, no conocían un libro o no sabían lo que era sentarse a aprender el abecedario de punta a punta.

Esta idea no era nueva, pues aquella pareja (ella, contadora y él, dedicado desde 2011 a la ebanistería) vive en San Vicente desde 2005. En esa época, ella inició su trabajo como promotora infantil y juvenil de lectura en compañía de Reina Amparo Restrepo, quien la ayudó a injerir en diversos proyectos como la ‘Fiesta de la lectura’, siendo este la puerta de entrada a interesarse por promover un cambio en las necesidades educativas de centenares de niños en el departamento.

Posteriormente, don Humberto se unió a esa preocupación por llevar la educación a las zonas más apartadas de San Vicente del Caguán, pero primero, empezaron creando materiales didácticos y juguetes para que los niños pudieran aprender a través de la actividad lúdica. Así, nació el ‘Círculo de Creaciones Didácticas’, donde generaron empleo a madres cabeza de hogar y personas pertenecientes a comunidades vulnerables.

“Siempre tuvimos la idea de que los juegos fueran con residuos de madera para evitar la tala de árboles” señaló doña Luz Stella en diálogo con Radio Nacional de Colombia; pero ahora con los juguetes ya hechos, la pregunta era: ¿Cómo avanzar en esa propuesta educativa?

Don Humberto lideró la idea de convertir una camioneta que Luz Stella heredó de su padre en una biblioteca itinerante, y su creatividad permitió que ‘La Casita de los Sueños’ pasó de ser una fantasía a una realidad. Desde entonces, realizan diversos recorridos haciendo pedagogía a través de la estrategia ‘Baúl fantasía’.

Durante estos 11 años desde que la biblioteca móvil prendió sus motores, ha visitado un total de 267 centros educativos en 15 de los 16 municipios del Caquetá. Asimismo, han visitado otras regiones del país, como Bogotá, Manizales, Cali, Pitalito (Huila) y Mocoa. Incluso, su página web reporta que más de 60 mil personas han participado de cada una de sus iniciativas.

Actualmente, la ‘Casita de los sueños’ promueve el proyecto ‘El Caguán vive la Paz a través de las Letras’, donde se apoyan a maestros rurales para que sean formados de cara a la educación en zonas apartadas; incluso, enseña a padres de familia cómo formar a sus hijos en temas lectoescriturales.


Fuente: Infobae


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FUNDACIÓN LA CASITA DE LOS SUEÑOS



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